Uno de los motivos principales que me llevó a comenzar el proyecto de Seguridad Vial en Familia fue al constatar que en la maravillosa isla de Gran Canaria, donde tenemos nuestro hogar, apenas hay opciones de acceder a comprar en un comercio físico un Sistema de Retención Infantil a contramarcha.
Como ya expliqué en su día en este artículo ,preguntar en un comercio de puericultura de esta isla solo trae caras de asombro y estupefacción en los vendedores. Apenas hay variedad y por supuesto, físicamente es muy complicado encontrar una silla a la venta aquí que haya superado el plus test sueco.
Una vez acabadas todas las charlas que doy, las familias no dejan de preguntarme donde poder adquirir este tipo de sillas. Las opciones que teníamos por aquel entonces en Gran Canaria eran dos: o ir a Tenerife o pedirlas por Internet.
Comprarlas por Internet tiene sus inconvenientes y realmente es algo que desaconsejamos, a no ser que no exista otra opción viable: no hay una buena asesoría o directamente no hay ninguna, no podemos ver ni tocar ni probar la silla, no asistimos a una demo de la misma, no podemos comparar in situ otras, y lo que es más importante, no podemos probarla en nuestro coche con nuestro hijo para verificar la correcta elección de la misma, y tampoco hay posibilidad de que nos expliquen la misma en persona ni nos la instalen. Pero es que además a veces llegan en mal estado o defectuosas, con el inconveniente de tener que devolverla a la península o al extranjero, son la consiguiente pérdida de tiempo y dinero.
Comprarlas por Internet tiene sus inconvenientes y realmente es algo que desaconsejamos, a no ser que no exista otra opción viable: no hay una buena asesoría o directamente no hay ninguna, no podemos ver ni tocar ni probar la silla, no asistimos a una demo de la misma, no podemos comparar in situ otras, y lo que es más importante, no podemos probarla en nuestro coche con nuestro hijo para verificar la correcta elección de la misma, y tampoco hay posibilidad de que nos expliquen la misma en persona ni nos la instalen. Pero es que además a veces llegan en mal estado o defectuosas, con el inconveniente de tener que devolverla a la península o al extranjero, son la consiguiente pérdida de tiempo y dinero.
Por ello, decidimos viajar a la isla vecina ya que por aquel entonces era el único lugar donde encontramos la silla que buscábamos. Pero no a todas las personas que vivimos en Gran Canaria o en otras islas pueden realizar un viaje en barco para ir a comprar un sistema de retención infantil. Siempre recomiendo en mis charlas comprar la silla en un comercio donde nos puedan asesorar gente comprometida y convencida con la seguridad de los más pequeños y tener la opción de probar la silla.
(editado a 14/12/2015)
A día de hoy afortunadamente todo esto ha cambiado y ya en Gran Canaria las familias pueden acceder a sistemas de retención infantil a contramarcha con plus test sueco con asesoría previa sin coste y sin compromiso, y lo que es más importante, prueba en los vehículos e instalación igualmente incluida con www.contodaseguridad.com, incluyendo por supuesto la silla donde viaja mi hijo desde su segundo día de vida, la Kiss 2 de Klippan). También se desplazan periódicamente para su entrega e instalación a otras islas en las que aún no se puede adquirir con garantía de asesoría especializada sistemas de retención infantil a contramarcha.
(editado a 14/12/2015)
A día de hoy afortunadamente todo esto ha cambiado y ya en Gran Canaria las familias pueden acceder a sistemas de retención infantil a contramarcha con plus test sueco con asesoría previa sin coste y sin compromiso, y lo que es más importante, prueba en los vehículos e instalación igualmente incluida con www.contodaseguridad.com, incluyendo por supuesto la silla donde viaja mi hijo desde su segundo día de vida, la Kiss 2 de Klippan). También se desplazan periódicamente para su entrega e instalación a otras islas en las que aún no se puede adquirir con garantía de asesoría especializada sistemas de retención infantil a contramarcha.
Así que ya no es necesaria la recomendación que les daba a las familias canarias, de que aprovecharan cualquier viaje a la península y compraran la silla una vez allí y la trajeran en el avión a su regreso, con el inconveniente del viaje, y de no disponer allí de su vehículo par ala prueba ni poder tenerla instalada después de la compra, pero antes no había opciones.
Afortunadamente ya no es necesario hacer una "master" por tu cuenta para la compra de una silla a contramarcha para tu peque ni jugártela comprándola a ciegas por la red :), gracias al proyecto www.contodaseguridad.com que surge para llevar la seguridad vial a los más pequeños de la familia.
Afortunadamente ya no es necesario hacer una "master" por tu cuenta para la compra de una silla a contramarcha para tu peque ni jugártela comprándola a ciegas por la red :), gracias al proyecto www.contodaseguridad.com que surge para llevar la seguridad vial a los más pequeños de la familia.