Nuestra silla

Nuestra silla

Comprar un buen sistema de retención infantil en Canarias es bastante complicado por la escasez de oferta que tenemos en nuestras islas. Y es que , apenas llegan buenos productos a las islas. 
Cuando supimos de la buena noticia del embarazo de mi mujer, empezamos en la ardua tarea de buscar un buen sistema de retención para nuestro pequeño. Varios meses antes de su llegada al mundo ya teníamos la silla en casa. tanto mi mujer como yo sabíamos lo que queríamos en este sentido: Una silla a contramarcha. Después de mucho navegar por la red, nos quedó bastante claro que a contramarcha es lo más seguro. 
Pero claro, al ir a comprarla en la isla, nos dimos de bruces con la triste realidad de la seguridad vial infantil que tenemos en nuestra tierra. Cargados de ilusión encaminamos nuestros pasos hacia unos grandes almacenes y con toda la ilusión del mundo preguntamos por la oferta de sillas a contramarcha que tenían..." ¿A contra que?" "Eso no existe" , "Bueno si existe pero está prohibido", " En España no lo van a permitir..." fueron algunas de las respuestas del vendedor... Nuestro gozo en un pozo...
También en nuestro grupo de preparación al parto nos encontrábamos con las mismas caras de estupor y extrañeza ante lo que queríamos para nuestro hijo... Si en la península ibérica las familias son reticentes en llevar a contramarcha a los niños, en Canarias aún más.
No nos vinimos abajo y seguimos buscando y finalmente encontramos lo que buscábamos en la maravillosa ciudad de Sevilla ya provechando una visita a los futuros abuelos acudimos a una tienda especializada donde nos explicaron y nos formaron en la instalación de nuestra silla. Tenemos un Renault Megane y mi padre también así que montamos la silla en el de mi padre, vimos que se adaptaba perfectamente y con un reclinado adecuado y nos la trajimos de vuelta en el avión. Afortunadamente, a día de hoy, ya es posible encontrar buenas sillas acm en Gran Canaria, especialmente gracias a con·toda·seguridad
 Desde el primer día que mi hijo salió al mundo, el va en su silla a contramarcha. Hoy, 20 meses después sigue así y de esta manera estará el máximo tiempo posible. 
A pesar de los contratiempos que te llegaban de los "supuestos" entendidos en la materia, que se jactaban de que el niño no iba  apara de llorar al no verte, de que se iba a agobiar viendo el respaldo del coche y todo tipo de lindezas parecidas. 
Yo no me canso de decirles a todos los que me preguntan de los beneficios de ir a contramarcha, tales como: 
¿ Que porqué es tan importante llevar a los niños el mayor tiempo posible a contra marcha? 
Porque los padres no tenemos en cuenta la importancia de la proporción del cuerpo de nuestros hijos ni de que en caso de accidente, las partes más vulnerables del cuerpo, como por ejemplo la cabeza, son las que más daños graves sufren y a la hora de elegir una silla parece que nos olvidamos de esto y lo único que nos importa es el precio de la misma y no la seguridad que proporciona. Si queremos conseguir una protección eficaz, nuestra silla de auto deberá salvaguardar de manera exquisita las partes más frágiles de nuestro hijo: la cabeza, el cuello y los órganos internos.
Por último me gustaría hacer una reflexión personal y lanzar una pregunta que pasa por mi cabeza cada vez que veo a niños menores de 4 años viajando en dirección a la marcha ¿por qué no te importa gastarte 600€ en un carrito de bebé donde las posibilidades de lesiones son casi nulas pero en cambio sí te cuesta gastarte ese mismo dinero en una silla que es el único medio que puede salvar a tu hijo de una lesión grave, como por ejemplo quedar tetrapléjico o parapléjico e incluso morir en caso de un accidente? Seguro que has investigado de día y de noche para elegir el mejor carrito que se adaptase a vosotros y has reunido el dinero de amigos y familiares para poder comprártelo, sin embargo luego has ido a la tienda y has elegido el sistema de retención infantil (SRI) más barato porque “no puedes permitirte otro”. ¿No debería ser al revés?
Nosotros 20 meses después seguimos contentos y felices con nuestra silla a contramarcha y gracias a que cada día hay más familias informadas, en Canarias cada vez más se ven a los niños viajando a contramarcha.